Cancún es una ciudad que crece más cada día, y con ella, la cantidad de atracciones que llaman la atención de más y más turistas. Sabemos que en tu viaje por este increíble destino quieres conocer todo lo que puedas, y por ello no puedes perderte la oportunidad de ver el mejor paisaje de la Zona Hotelera y de la laguna Nichupté de Cancún.
Esta espectacular estructura tiene 60 metros de altura y cuenta con 42 góndolas hechas de fibra de vidrio y acrílico con capacidad para hasta 6 adultos, así como aire acondicionado. Además cuentan con una góndola VIP con mayor confort y visibilidad, pues tiene el suelo de cristal.
Antes de entrar a las góndolas, deberás hacer fila en los barandales del costado, en donde un operador te dará instrucciones específicas del funcionamiento de la atracción. Seguramente mientras lees este artículo está cruzando por tu mente el temor a las alturas o la claustrofobia, pero no hay nada que temer, la góndola cuenta con un botón de comunicación directo con la cabina de control, por lo que en todo momento podrás solicitar que te regresen al suelo.
La oportunidad de ver Cancún desde otra perspectiva es impresionante y una experiencia realmente inigualable, sobre todo siendo en el corazón de la Zona Hotelera. Durante 30 minutos y en el horario que elijas, un increíble paisaje está asegurado.
La Gran Rueda Cancún te ofrece distintas perspectivas y una gama cromática distinta dependiendo la hora del día, por la mañana podrás ver colores turquesas en la vista del mar caribe, por la tarde, si te preguntas dónde ver el atardecer en Cancún te sugerimos la Gran Rueda para poder disfrutar una paradisiaca puesta de sol con la laguna Nichupté, por la noche puedes observar las estrellas y el espectáculo de luces de la vida nocturna que sucede a un par de kilómetros en la zona de clubs nocturnos de Cancún.
Puedes encontrar este nuevo hot spot de Cancún en Plaza La Isla Cancún. Uno de nuestros lugares preferidos para que te pases un día increíble, después de un divertido día de compras, comer en alguno de sus restaurantes, una visita al museo de cera o incluso un nado con delfines en el Acuario Interactivo, puedes terminar tu día con broche de oro observando Cancún a casi doscientos pies de altura.